Impacto del IPC en el comercio exterior en Colombia

¿Qué es el índice de precios al consumidor (IPC) y para qué sirve?

El índice de precios al consumidor es un dato estadístico que mide la evolución del costo promedio de una canasta de bienes y servicios representativa del consumo final de los hogares de un país, expresado en relación con un período base. 

El IPC sirve, entre otros, para:

• Medir los cambios de precios de los bienes y servicios que conforman la canasta.

• Calcular el costo de vida de un país, siendo la medida más precisa de la inflación.

• Entender la evolución de la situación económica de un país y proyectarla.

• Evaluar los resultados de la política monetaria y fiscal.

• Comparar la economía de un país con la de otros países.

• Además, se utiliza como referente para ajustar salarios, valores y tarifas.

Comparando dos períodos, las variaciones porcentuales positivas de este índice se conocen como inflación y las variaciones negativas como deflación.

El IPC en Colombia

El IPC en Colombia es calculado mensualmente por el Departamento Administrativo Nacional de Estadística, DANE, entidad a la que, de conformidad con el literal j) del artículo 2º del Decreto 3167 de 1968, le corresponde establecer los índices de precios a nivel del productor, del distribuidor y del consumidor, de los principales bienes y servicios.

La canasta de bienes y servicios se elabora a partir de la Encuesta Nacional de Presupuesto de los Hogares, ENPH, que se realiza cada 10 años por el DANE. La última ENPH se realizó entre julio de 2016 y julio de 2017.

En la actualidad, el DANE registra mensualmente el precio de 443 artículos que conforman la canasta, divididos en 12 grupos de gasto, tales como alimentos y bebidas, prendas de vestir, arriendos, servicios públicos, artículos para el hogar, salud, transporte, servicios de información y comunicación, recreación, cultura, educación, restaurantes y hoteles, y otros bienes o servicios diversos.

Para ello, consulta mes a mes más de 55.000 fuentes de información, visitando diferentes canales de distribución en 38 ciudades del país, donde los colombianos adquieren bienes y servicios, incluidas tiendas de barrio, supermercados, plazas de abastos, grandes superficies, establecimientos especializados en la venta de artículos y en la prestación de servicios.

Una vez se registran los cambios de precio, si suben o si bajan, para cada artículo en la canasta de bienes y servicios, se calcula la variación entre un periodo de tiempo y otro.

La variación del precio de un bien o servicio es la suma ponderada de las variaciones de precio del artículo en las ciudades investigadas.

Cada 10 años también se revisa la metodología de cálculo del IPC, teniendo en cuenta los cambios socio económicos estructurales, como la conformación de los hogares, la consolidación de la clase media y la reducción de los indicadores de pobreza. Así mismo, se modifica el año de referencia o año base. A partir de 1979, el IPC presentado corresponde al índice de precios al consumidor total nacional ponderado, el cual ha cambiado de base en cuatro oportunidades: diciembre de 1988, diciembre de 1998, diciembre de 2008 y diciembre de 2018.

El IPC es publicado por el DANE el quinto día hábil de cada mes e incluye la variación de los precios al consumidor ocurrida en el país durante: i) el mes inmediatamente anterior (del primero al último día del mes); ii) lo corrido del año (del 1º de enero al último día del mes de cálculo), y iii) los últimos doce meses.

En Colombia, con el IPC total a nivel nacional del año inmediatamente anterior se indexan o actualizan los valores de arriendos, cuotas de administración, servicios públicos, matrículas educativas, peajes, algunos impuestos, transporte, servicios de salud, sanciones, entre otros.

Impacto del IPC en el comercio exterior

El comercio exterior y las variables macroeconómicas están estrechamente relacionados entre sí y dependen unos de otros. De esta manera, el comercio exterior influye en las variables macroeconómicas, como el ingreso nacional, el empleo, los niveles de precios y el consumo y, por otro lado, las variables macroeconómicas influyen en el comercio exterior.

En este sentido, si el precio de los bienes importados que hacen parte de la canasta se incrementa, es muy posible que haya inflación doméstica.

En el caso colombiano, de acuerdo con un artículo publicado por La República, LR, el 19 de octubre de 2022, “[s]egún la canasta básica familiar, de la cual salen los elementos que tiene en cuenta el DANE para la elaboración del IPC, LR pudo confirmar que al menos 38% son importados”. En consecuencia, siendo este un alto porcentaje de la canasta y habiéndose incrementado en general los precios de los bienes importados después de la pandemia por el Covid-19, esto se ve reflejado en el aumento del IPC.

A su vez, si el precio de los productos nacionales es elevado frente a los extranjeros, es muy posible que los consumidores prefieran los productos importados. Sin embargo, las elecciones de los consumidores dependerán del comparativo que realicen los diferentes grupos poblacionales y sus hábitos de consumo.

Para poder determinar cómo está afectando la inflación (o deflación) doméstica a un país es necesario analizar también los niveles de precios en los países competidores y en los importadores.

Si quieres conocer más sobre los efectos de la inflación en el comercio exterior consulta el blog “Efectos de la inflación en el comercio exterior colombiano” e ingresa ahora a nuestro portal Legiscomex para conocer los datos sobre comercio exterior actualizados https://bit.ly/2OhK8dn