Es reconocido como el método más tradicional y sencillo para dar inicio a la internacionalización, a medida que se va adquiriendo experiencia y se consigue consolidarse en el mercado se pueden elegir otros métodos diferentes. La exportación puede hacerse por medio de una organización ajena de exportación, o por medio de la propia empresa. Inicialmente se exporta los productos y/o servicios con pedidos esporádicos, luego se puede acudir a distribuidores para que realicen la comercialización. .
Las ventajas con las que cuenta esta modalidad son:
- Evita coste y riesgos de las actividades en el exterior, puesto que los productos se crean en el mercado nacional y después se exportan
- Reduce sus gastos de producción al expandirse y asi mismo ayuda a adquirir experiencia. Las empresas pequeñas son las que suelen utilizar esta modalidad, ya que no cuentan con medios para fabricar en el exterior.